"Hace ya varios años sufrí una crisis nerviosa justo cuando comenzaba a desarrollar síntomas de una enfermedad reumática. Estaba llena de temores y asustada, tanto que ya no podía dormir, comer, o inclusive estar sola sin que tuviera ataques de pánico por los síntomas constantes de esta enfermedad. Decidí realizar un tratamiento de hipnosis gracias a la recomendación de una amiga que me ayudo a encontrar la Clínica del Doctor Lamiña. Yo le agradezco infinitamente su ayuda en el proceso de mi recuperación mental. Me ayudo a auto descubrirme y a entender mi enfermedad, mis miedos a la muerte, y mi vida. Gracias al tratamiento de hipnosis pude recobrar mi independencia como persona y mi más anhelada tranquilidad. Llevo ya tres años luego de su tratamiento y sigo muy bien de salud, mis síntomas reumáticos están allí, pero ya no me asustan, controlo el estrés que los desatan y más que nada puedo dormir en paz. Recomendaría a cualquier persona tomar terapias con el Dr. Lamiña. Su servicio es excelente, la terapia toma su tiempo los resultados están a la vista pronto y la recuperación final es permanente.".
Nata M.
Ataques de PanicoCon el paso del tiempo, después de haber recibido terapia de su parte, me siento muy fortalecido emocionalmente, siento que aquellas cosas de mi pasado y que resultaron perjudiciales en mi presente han menguado en gran medida. Siento que me he quitado un peso de encima y he aprendido a valorarme y apreciarme por lo que soy. Mi matrimonio tomó una cierta fortaleza porque de alguna forma he tomado la posición que me corresponde como cabeza del hogar, tomando el timón y dirección de los míos, aunque la vida no es fácil ni sencilla. Sigo con mi esposa, logramos entender los hechos ocurridos y que terminaron en un declive emocional. Ahora es más fácil entender que una persona no puede de ninguna manera retener a nadie a su lado ni forzar a nadie a estar a su lado, sino que cada quien debe valorarse por lo que es y que si alguien decide no estar con nosotros es porque simplemente no debe estar y no es para nosotros. No se debe tener miedo a la soledad. El alcoholismo de mi padre dejó una gran huella en mi desde mi infancia, sin embargo, siento que ahora lo veo diferente y se refleja en mis actuaciones. Siempre fue un pretexto para sentirme mal, para bajo esa excusa hacer un sin fin de cosas malas pero ahora es un motivo para entender que no somos perfectos, que cada persona vive una vida diferente en su interior y cada persona tiene un montón de problemas con los que lucha cada día y que yo soy el propio responsable de mis acciones. Mi vida cambió mucho a partir del tratamiento que mantuve con usted y de hecho lo recomendaría sin dudarlo.
Adri
Alcoholismo Estimado Dr. Edwin Lamiña, lo que más me ha gustado de su programa de hipnosis, es que logre romper todas esas conductas aprendidas en el transcurso de mi vida, las mismas que me hacían sentir mal, deprimida y me bloqueaban en muchos aspectos. Es importante señalar que inicialmente parece que las cosas no cambian, que todo sigue igual, pero con un poco de tiempo y paciencia todo fue cambiando, mi vida a dado un giro de 360 grados, he aprendido amarme; y, ahora vivo por mí y para mí. A veces uno cree “amarse” cree que vivir para complacer a los demás esta bien, cuando es todo un error. Gracias a su programa me he convertido en la persona que siempre soñé ser, mis miedos casi han desaparecido, ahora me siento capaz de muchas cosas, mis relaciones interpersonales han mejorado muchísimo, he aprendido a conocerme, a expresarme, a comunicarme, a enfrentar las cosas. Le agradezco muchísimo toda la atención y ayuda que me ha brindado. Realmente me ha parecido un tipo de terapia muy eficiente.
Gaby
Depresión Tefy nombre cambiado a petición de paciente " Un día por la tarde mientras caminaba con unas amigas por la calle, encontré a mi ex de la mano de su nueva pareja, una sensación de rabia y dolor me invadió, puesto que hace unas semanas llorando me dijo que le de tiempo que me amaba, no podía creerlo estaba con otra chica, me sentí engañada, me abalance a golpearlo a el y a ella, yo no soy así, nunca había agredido a nadie no se que me paso, me dolía el pecho, sentía angustia, decepción, ira, inútil estas sensaciones al siguiente día fue como que todo lo que viví fue una mentira, que esa persona no existía, esto se acompañaba de angustia desesperación, hubiese querido que me busque , que me escriba, que llame, estaba pendiente del teléfono y el no saber nada de el me angustiaba mas aun cada día, una amiga me dijo necesitas algo "fuerte" para borrarle de tu vida a ese "tipo" es así como llegue a tratarme con Hipnosis Clínica, es mi cuarta sesión y ya no tengo ansiedad, es como si una venda se me retiro de los ojos, pude mirarlo tal cual el es feo, enano, calvo, no quiero estar con el puedo decir que lo supere, ademas pude darme cuenta que lo que buscaba era un padre mas que un novio, creo haberlo superado y estoy lista a disfrutar mi vida.".
Tefy
Medico Esteban L. 23 años, "Había llegado un momento en el cual me sentía que había perdido el control total de mi vida, que nunca volvería ser igual que antes, estaba fatal. Un día en la cátedra de filosofía, súbitamente, sin previo aviso mis manos temblaban, sentía que mi corazón empezaba a latir con una fuerza, con una aceleración que parecía que iba salirme del pecho, mis manos estaban empapadas de sudor al igual que mi cuerpo, inmediatamente un intenso hormigueo invadió todo mi cuerpo y una sensación de estar corriendo sin control se apodero de mí, es como si estuviese asfixiándome, era una sensación extraña, era como si todos supieran lo que me sucedía…..lo único que atine a realizar es salir corriendo por las náuseas intensas que me invadían, me aleje del salón de clases y sentí una tranquilidad gratificante”.
Esteban L.
Ataques de Pánico Maya L, 20 años, "Me encontraba frente a un gran espejo, dentro de mi casa, me probaba una falda corta, un pantalón y este me quedaba holgado todo me quedaba perfecto nada le quedaba mal, me miraba hermosa una mujer bella, segura confiada, una mujer que cada detalle que miraba en este espejo era perfecto, las cosas cambiaban cuando me miraba fuera de casa….sucedió aquella tarde de lluvia que me había obligado a escampar de la tempestad dentro de un centro comercial mientras paseaba tranquilamente de pronto al observar el espejo de una tienda una figura deforme me sorprendió, los brazos largos, las piernas gruesas, el cuello protuberante, las manos largas, el rostro deforme que se plasmaba en aquel espejo me hizo cerrar los ojos, eran imagenes como salidas de alguna obra de terror que me generaban miedo, angustia, pánico, un enorme temor de verme en ese espejos"....
Maya
Estudiante.